lunes, 3 de noviembre de 2008

Día de excursión

Hoy ha amanecido un día con un sol expléndido. Las mañanas agradables te alientan a salir de casa y dirigirte a la inmensidad de lo que te envuelve. Preparo un bocadillo para aliviar el hambre cuando me llegue. La botellita del agua vendrá bien para ayudarme alcanzar la meta propuesta para hoy. Hoy es el primer día de vacaciones en la montaña. Las alturas no son muy altas pero pueden llegar a cansarte si dura mucho tiempo.
Salgo de casa dispuesto a dar un paseo y llegar al mente donde veo una Cruz. Fue colocada por la gente animosa del pueblo. El caminar solo suele ser más rápido que si vas acompañado. También te paras para disfrutar de todo lo que rodea y oir los sonidos de los pájaros que unas veces ves y otras te mueves para poder observarles.
El camino por el que voy andando es soleado y agradable para la vista por lo que te rodea. Voy subiendo por un camino bastante fácil pero siempre en pendiente hasta llegar a unas piedras grandes donde siempre uno para para descansar y disfrutar de los montes de enfrente donde puedes ver las colmenas de algunos vecinos.
Me pongo a continuar la andadura hacia arriba. La montaña se hace menos empinada y puedes ver y observar todo alrededor. sigues subiendo hacia la derecha. Los árboles no son muy altos y hay además mucho secos. El camino te indica por donde puedes ir tranquilamente y poco a poco vas viendo los pueblos que están a tu vista. Unos son más grandes y otros más pequeños, pero todos encierran vida . Sigo adelante y después de unas bajadas y subidas pequeñas llego a la Cruz y desde ahí la vista se hace más agradable. Ves montes por todos los lados. La vista va lejos y puedes ver y darte cuenta de los picos que te rodean.
Se ve las obras del pantano que están haciendo que irá todo él entre las montañas.
El paseo parece que llega a su fin después de haber grabado en la mente las vistas que se han acercado a mis ojos.
Me doy la vuelta por el mismo camino por donde he subido.

No hay comentarios: